La hinchazón del intestino grueso es común en la mayoría de personas.
El sistema digestivo es de los más importantes en el cuerpo y una de las partes que más sobresalen para ser cuidadas son los intestinos, en especial el grueso, debido a que tienden a inflamarse.
En términos médicos, Medlineplus, el portal web de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, explica que al intestino inflamado se le asocia con el diagnóstico del síndrome del intestino irritable.
Para los médicos norteamericanos, dicho síndrome afecta directamente al intestino grueso y causa ciertos signos como dolencias y distensión. En la misma corriente de ideas, se especifica que se trata de un cuadro de enfermedad común en las personas, aunque es más común en aquellas que tienen menos de 45 años.
Pese a que el síndrome del intestino irritable es diagnosticado por los especialistas en salud, no se ha podido establecer una causa puntual por el cual se produce. Sin embargo, “la mayoría de las personas con diagnóstico de síndrome del intestino irritable puede controlar sus síntomas con dieta, manejo del estrés, probióticos y medicinas”.
En lo que respecta a la dieta, la alimentación juega un papel esencial para mejorar la salud en ciertos aspectos, siendo el intestino uno de los órganos que más beneficios puede tener.
Precisamente, el intestino se puede inflamar por algunos alimentos, razón por la que existe un tipo de harina a la que se adhiere la posible acción de no provocar este síntoma que, por lo general, hace que el estómago se hinche.
La harina que no inflama el intestino
Según Infosalud, los productos con harina integral son los menos agresivos para el intestino. En ese sentido, se sostiene la premisa de que el pan integral es “un aliado contra los problemas gastrointestinales”.
A la harina integral con la que se prepara el pan se le destaca el alto aporte de fibra para el cuerpo. Esto se suma a las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS) de comer entre 25 y 30 gramos de fibra al día.
El citado portal de salud consigna que con el avance de los postulados científicos, con las variedades de la harina integral, puede que se presente una ayuda en el “mantenimiento y buen funcionamiento del tránsito intestinal”.
Adicionalmente, se comparte que la harina integral puede que promueva la flora intestinal, de modo que estimula los procesos del intestino. Con ello, se previenen “patologías intestinales como son el estreñimiento o la diverticulosis”, las cuales provocan inflamación en esta parte del sistema digestivo, caracterizado por absorber agua y cambiar los desechos líquidos a la formación de heces, según los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos.
Antes de finalizar, los mismos conocedores del tema de la salud en Norteamérica recalcan que “las bacterias en el intestino grueso ayudan a descomponer químicamente los nutrientes restantes y producen vitamina K”, de allí que su correcto funcionamiento sea vital para la calidad de vida de las personas, sin importar la edad o sexo.