La clave para una relación sana y feliz que muchas veces se pasa por alto

Es fundamental para nuestro bienestar y nuestro crecimiento personal y de pareja.

Aunque una buena comunicación es esencial, no es precisamente la única clave para una relación sana y feliz ni mucho menos. Una buena unión debe basarse en distintos aspectos de la dinámica de pareja, pero también en la individual.

Sin embargo, es fácil que al estar con otra persona podamos perder de vista una de las cosas más necesarias para nuestro bienestar: el espacio personal. Según explica la especialista Annie Tanasugarn, mantener un espacio personal es un gran predictor de las relaciones sanas, por lo que también es una clave para poder conseguir que la tuya sea así.

Ahora bien, ¿a qué se refiere con eso exactamente? No hablamos únicamente de poder pasar tiempo solo, o tener tus propias aficiones que hacer por tu cuenta o salir con tus amigos sin tu pareja, que también es fundamental porque no hace falta hacerlo absolutamente todo juntos.

En este caso la experta se refiere a que cuando estamos en pareja, también necesitamos poder disponer de un ambiente, un espacio, en el que no haya juicios ni prejuicios, “sin expectativas ni presiones” donde “abordar sus propios objetivos y convertirse en mejores versiones de sí mismos” concluye Tanasugarn.

Esto significa que se puede crecer y evolucionar sin miedo al cambio y, sobre todo, sin miedo a que la otra persona se marche, lo que llevará a que la pareja también pueda crecer a la vez y que la unión entre ambas partes se fortalezca.

Es la clave para una relación sana y feliz porque con el paso del tiempo el crecimiento personal es inevitable y positivo evidentemente. Si no se tiene un espacio para ello, al final en lo que puede acabar transformándose es en frustración y problemas que no ayudarán a nadie.

¿Acaso no quiere todo el mundo poder estar con alguien que lo apoye y que le permita navegar los cambios sin poner piedras en el camino? Puede parecer básico, pero desafortunadamente no siempre se cumple y no siempre nos damos cuenta de que falta. Así que si quieres un buen futuro, no olvides tu espacio personal ni tampoco dárselo a tu media naranja.